El local del Partido Socialista (ubicado en Plaza Bolognesi) abrió sus puertas desde las 8 pm, y ya podías encontrar una surtida feria de fanzines a cargo de Lima Rabia (Chato Viktor) y Estante 18 (Víctor Vilcapuma); y para las personas con apetito y sed hamburguesas veganas (100 % vegetarianas) y cervezas al polo. Siendo un poco más de las 9 pm comenzarían a sonar El Intraterreno y los Almas Negras, banda que en breve estará lanzando su primera maketa oficial. Su sonido crudo y disonante los hace una de las propuestas más raras e interesantes, y claramente lo demostraron con los temas Cuánto hay que pagar?, Masticando el hambre, Una y mil veces y para cerrar su presentación Legalizar, uno de sus tantos temas nuevos. La gente seguía llegando, pero aún el hielo no se rompía, pero con la llegada de KADE la historia fue otra. El topo y sus secuaces captaron la atención del respetable desde su llegada, y fue con la canción Skazes que se desató el primer pogo-baile de la noche. Pero esa no fue la única bailada, además le siguieron los temas Hartos, Es el fin y la rola más conocida Kallao / NSDMB. Esta noche, como en Cailloma la noche de Anarkia Tropikal, Topo llegó con su muñeca de Keiko, y en el medio del pogo fue su sacrificio colectivo.
Entre aplausos y luces sicodélicas la fiesta continuaba, y era el turno de las féminas de Kromosoma X, con toda su dosis punk rock en shorts cortos y polos negros ajustados. Con una formación distinta a la de años pasados, la banda demostró que todavía está vigente y que el próximo material (que en un toquecito sale) va a patear culos, como lo hicieron las canciones Tu verdugo, General Muerte, Moriré, Ayatolah (Siniestro Total), así como lo hace Ratas Kallejeras el cover que tocan de Eutanasia, con la que culminaron. No pasó mucho tiempo para que El Terrible y Los Mongoloides entren a la acción, con un vocalista en pantys y calzoncillo rojo, lo que atrajo la mirada de varias chicas, y de chicos también. Ellos se encuentran terminando la producción de "Indicios de un Legado", su primera producción oficial. Putrepunkrock, Destruir, Generación negativa, Anestesia y varios covers que hicieron de su presentación un karaoke punk rocker dejaron satisfechos a los que estábamos viendo su presentación, ante un Mongoloides cada vez más sólido y rockero, como nos gusta.
El punk rock tomaba un descanso y el concierto se tornaría más velóz, ya que The Muertos estaban listos para comenzar el desmadre. Están con todas las de sacar su segundo disco en poco tiempo, y su presentación estuvo cargada de rolas nuevas como Campeón, Hoy no ha muerto nadie, Riñón e imbécil, y las ya conocidas Cabeza de martillo, La momia, El descuartizador, B4NZ41 y The Muertos, la que desató la locura de la gente que arrebataba el micrófono para gritar con toda su fuerza y vivirla con todo. Seguirían quienes se han convertido en una de las sensaciones del momento: Los Mortero. Con el lanzamiento de "Pisar Un Bicho", su primer disco, han captado la atención de muchos, y bien aprovechado por ellos ya que están tocando con mayor frecuencia. El público esa noche los respaldaría con el tremendo baile que se metieron, y todos los coros que le hicieron a Mauricio. Tanto rolas nuevas (Reventar, Vichamos, Invasión, Vivo por la lucha) como las de su disco (Adicto y el solo de batería, Vendo mi guitarra, El mundo da vueltas y Buscas mi furia) formaron parte de su presentación, que quedará para el recuerdo de muchos, y para cerrar la canción que le da nombre a su disco, con lo que el último pogo se volvió nuevamente un karaoke chapa-micrófono.
Eran más de la medianoche, y la fiesta estaba en su punto. Gente por los pasillos leyendo fanzines y chupando chela, conversando con las bandas y adquiriendo su material, cerebros comenzando a destruirse y la máquina de hardcore P.D.I. estaba a punto de elevar la nota. Siendo casi 20 años desde que se formó la banda, este año editarán su material oficial, dejando atrás el recuerdo de esa maqueta que circula por internet; y es que la banda ya no suena para nada a éso. Ahora, con un sonido más moderno, en toda la vena de Agnostic Front, P.D.I. regresa con más furia que en años anteriores, y esta vez para quedarse. Entre las rolas que tocaron están El tiempo enseñará, Ríos de sangre, Círculo de violencia, el clásico Pilsen Callao y para terminar Mirando hacia atrás, con lo que las revoluciones bajarían para continuar con la fiesta popular. Desde Costanera y el rico Agucho llegaron Suicidas, trayendo bajo el brazo el adelanto de su próxima producción y un cargamento de punteos chicheros que nos transportaron hacia alguna calle de la av. Riva Agüero. Su sonido tropical le ponía el saborcito a la tocada, y con canciones como La morena, Pan duro, El ska del muerto, No sabes cuánto me cuesta y Drogable juventud se armó el tono en el Centro de Lima.
La hora pasaba y vendría la hora del fin de fiesta, con las 3 bandas que quedaron para el final. MoRbo, quienes siguen promocionando su K-7 "De Baja Calidad" armaron el pogo más rico y necio de la noche, con todos sus éxitos y lo mejor del material nuevo. Cómo olvidar el pogo de Cultura juvenil, Posero es ser normal, Si maduro me pudro y Represión, con la que la gente comenzó a abrazar a Manillas y a cantar a su lado, haciéndolo parte de la fiesta y el ritual punk rock que se estaba viviendo. ¡Qué paja estuvo MoRbo carajo! Sin ser menos importantes que la banda anterior, los Adictos al Bidet estaban por comenzar a necear el show. Ellos también se encuentran en proceso de grabación de lo que sería su primer LP, que esperamos salga en los próximos meses. Junto a The Muertos, son una de las bandas con mayor actividad en conciertos de los últimos tiempos, los que los mantiene en una práctica constante. Arrancarían con El abogado (rola nueva), y luego sus éxitos Quiero ser tu amigo (con beneficios), Calavera, Parásito, Bad Shiet, I wanna Riot (Rancid) y Ni que fueras mi mamá, entre otras. Casi a las 3 am entraría en escena la última banda del concierto, los punkeros de Aeropajitas, quienes estan a puertas de sacar su nuevo disco. Muchos se quedaron hasta el final solo para verlos en acción, y todo se midió con los pogos de Mala fe, El golpe, Lima Enfermedad, Todo sigue igual, Exterminio, Revuelta, Yo era vírgen y El fantasma. A pesar de que era tarde la gente quería más, y quién no si todavía la fiesta no terminaba. Pero todo llega a su fin, y fue con Grito de Muerte que los amplificadores sonaron por última vez esa noche.
Estoy seguro que muchos cerebros quedaron destruidos esa noche, pero a la vez se fueron con la impresión de un concierto distinto, con bandas vigentes y que tienen o tendrán material que ofrecerles, que están sonando en muchas cabezas y que poco a poco siguen metiéndose más al fondo, en nuestra movida local. ¡Vamos a Palacio, yo conosco el tunel!
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